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1. Fisiología respiratoria y embarazo
1.5 SUEÑO Y EMBARAZO

Alteración calidad sueño. Sueño. Insomnio. Somnolencia Los trastornos del sueño son comunes en el embarazo, como resultados de cambios físicos y bioquímicos. La American Academy of Sleep Medicine define una entidad clínica denominada trastorno del sueño asociado al embarazo como la ocurrencia de insomnio o somnolencia excesiva que se desarrolla en el curso del embarazo50.

Se han descrito en embarazadas una serie de cambios que pueden influir sobre la calidad de su sueño. Entre otros, la resistencia de las vías aéreas superiores puede estar incrementada por alteraciones en la vía aérea superior (edema de la mucosa, hiperemia, hipersecreción de moco) como causa de los niveles elevados de estrógeno. La progesterona tiene un importante efecto sedante, por lo que se especula que pueda tener un efecto protector durante el embarazo, favoreciendo el descanso de la gestante. El nivel de cortisol también se incrementa durante el embarazo y se asocia con la depresión clínica y las alteraciones en el sueño detectadas (aumento de los movimientos oculares rápidos-REM y disminución de la latencia). La eficiencia del sueño se reduce y sigue siendo pobre hasta 3 meses después del parto51,52. Además, la distensión abdominal, los movimientos fetales, la distensión de la vejiga, el aumento de la frecuencia urinaria, la lumbalgia y pirosis asociadas al embarazo son factores conocidos que pueden influir en la calidad del sueño. 

Ronquido. Síndrome de apnea del sueño. Tercer trimestre. Hipoxemia materna. Preeclampsia El ronquido es un síntoma común durante el embarazo y se produce entre el 14% y el 23% de las mujeres embarazadas en el tercer trimestre en comparación con el 4% de los de las no embarazadas en controles de la misma edad52. Así mismo se ha observado que en el primer trimestre, las mujeres embarazadas tienen un 10,5% de prevalencia de síndrome de apnea-hipoapnea del sueño (SAHS), que en el tercer trimestre puede llegar hasta un 26,7% (siendo este aumento mayor según el índice de masa corporal y la edad materna)53. A pesar de que las consecuencias clínicas del SAHS en el embarazo no han sido ampliamente estudiadas, trabajos recientes sugieren que el SAHS presente en el embarazo es probable que aumente el riesgo de hipertensión gestacional, preeclampsia, diabetes gestacional y que quizás favorezca el retraso del crecimiento uterino54-55. Episodios repetidos de eventos respiratorios obstructivos dan lugar a episodios clínicos de hipoxemia materna. Lo cual debe ser tenido en cuenta, por las posibles repercusiones que pueda tener en el feto. Por otro lado, la hipertensión y la vasoconstricción periférica que están comúnmente asociadas al SAHS, es bien conocido que están relacionadas con una mayor tasa de desprendimiento prematuro de la placenta56.