BIOLÓGICOS EN EL TRATAMIENTO DEL ASMA GRAVE EN PEDIATRÍA

Javier Korta Murua

Resumen


Se considera que casi un 5% de los niños asmáticos padecen un asma grave (AG), aunque algunos estudios estiman su prevalencia en torno al 8,8%

La definición de AG difiere en matices de unas guías a otras, pero podría considerarse  como tal, en niños mayores de seis años, aquel que requiere para su control un tratamiento con dosis altas de corticosteroides inhalados (ICS) más un segundo controlador.La definición puede ser más complicada en el grupo de lactantes y preescolares en los que el asma suele cursar con exacerbaciones graves y recurrentes asociadas a infecciones respiratorias de vías altas entre periodos relativamente bien controlados

Los niños con AG, sobre todo aquellos no controlados (AGNC), presentan frecuentes agudizaciones graves, pérdida de la función pulmonar, peor calidad de vida y riesgo elevado de padecer los efectos adversos de la medicación que reciben, todo lo cual genera un aumento del número consultas no programadas, asistencias a urgencias, hospitalizaciones, pérdidas de días de colegio y de trabajo de sus cuidadores, además  de unos costes elevados y un mayor riesgo futuro, como es el impacto sobre el desarrollo de la función pulmonar, estrechamente relacionado con la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).

Antes de establecer el diagnóstico de AGNC es necesaria una evaluación multidisciplinar para confirmar el diagnóstico y/o excluir trastornos con síntomas similares. Es preciso establecer la diferencia entre AG difícil de tratar (asociado a un diagnóstico incorrecto, presencia de enfermedades asociadas, mala adherencia al tratamiento, factores psicológicos y/o factores ambientales) cuyo control es posible si se aborda adecuadamente, ya que incluye elementos potencialmente evitables o modificables, y AG resistente al tratamiento que se define como un AGNC a pesar de abordar y manejar adecuadamente estos factores

Aunque se han reconocido diferentes fenotipos, más del 80% del AG pediátrico corresponde a un fenotipo alérgico, con sensibilización a diferentes alérgenos y a un endotipo T2 alto (IgE elevada, eosinofilia periférica y elevación de la fracción exhalada del óxido nítrico (FeNO).inhalation technique). Lo más habitual en estos pacientes es la observación de una función pulmonar normal o una mínima obstrucción de la vía aérea, siendo más frecuente en varones, no obesos y en edad escolar1,17. Así mismo, es habitual la asociación con otros procesos atópicos como rinoconjuntivitis alérgica, dermatitis atópica y alergia alimentaria.


Texto completo:

PDF HTML

Enlaces refback

  • No hay ningún enlace refback.